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lunes, 26 de agosto de 2013

EL JOVEN CON 'CANIBALISMO'

SU FAMILIA PIDE AYUDA
José Toribio Díaz hoy sufre por una enfermedad que, al perecer, no tiene cura. Si no lo cuidan, en las noches puede arrancarse la piel.   
Por: Luis Fernando León M.

Como una enfermedad sin precedentes han calificado los moradores de la vereda El Campo, en el municipio de Florencia- Cauca, la enfermedad que posee un joven de 19 años quien desde que nació ha tenido que ser sometido a diversos tratamientos altamente costosos para preservar su integridad y, sin embargo, al parecer no tiene cura. Se trata de Epilepsia, pero su familia la llama canibalismo.

Dramático testimonio
Causa estupor y casi un poco de dolor el conocer de parte de Carlos Andrés, su hermano, los percances que han tenido que vivir al cuidar de José Toribio Díaz desde muy pequeño, pues como él lo dice, cuando se descuida se arranca la piel. “Su enfermedad es muy extraña, por ejemplo, si escucha mucho ruido o que no haya tranquilidad se pone muy mal y empieza a descontrolarse, hay que aclarar que el no ataca a otras personas si no a él mismo”, dijo su hermano quien también narró un dramático testimonio: “Nos da mucho dolor y todo pero tenemos que cuidarlo, muchas veces él ni duerme y las sabanas al otro día amanecen llenas de sangre porque el donde se siente la piel durita se empieza a despellejar y entre más le duele, más fuerte se hace”.

Cómo inició la enfermedad
Al parecer este joven desde que nació padecía de epilepsia pero tan sólo a los siete meses de nacido fue donde se dieron cuenta que el menor padecía de este sufrimiento. “Él le daban convulsiones y los médicos empezaron a hacerles tratamientos, sin embargo, muchas veces no le funcionaban, inclusive a mi hermano le daban hasta 25 convulsiones diarias”, afirmó Carlos. Su tío Rubén Emiro Muñoz Erazo también nos contó que el niño fue creciendo y había momentos en que empezaba a estresarse y luego se ponía morado, pero desde los cuatro años empezó a rasgarse la piel. “En ese tiempo lo trajimos a Cali a un Instituto pero le avanzó más la rabia, debe ser la droga y pues también debe ser porque extrañaba su familia”, dijo el tío.

Las consecuencias
“Nosotros muchas veces nos desesperamos porque ya no sabemos que hacer. Debemos estar pendientes porque ya la piel la tiene muy maltratada de cuando se ha hecho daño, y a veces que no encuentra para arrancarse piel en otro lado, lo hace por el cuello. Nos da pesar del niño y hemos intentado buscar soluciones y buscarle remedios pero nada que se mejora”, dijo su tío. Otra de las consecuencias es que esto ha generado que la familia en muchas ocasiones tenga que elegir entre comer o comprar medicamentos que tienen un costo aproximado de $120.000 y que sólo les alcanza para pocos días. Además muchas veces no los reconoce y pues hay que darle otro tratamiento.

Los altos costos
Hoy en día esta situación la han logrado mejorar un poco pero con el amor de familia, pues estas personas no poseen los recursos suficientes para sostener el tratamiento para que José Toribio pueda estar medianamente bien. “Nos han mandado Carbamacepina de 200 mm 1 cada 8 horas, y 10 las cubría el Sisben pero nos tocó meter una tutela para que se las dieran, ahora el problema es que se las dieron un mes y después ya se la empezaron a dar pero genérica y no tiene el mismo efecto. Imagínese que se le da también Respirinola y esas nos cuestan $122.000 pesos y sólo traen 20 pastas pero hay que darle 1 diaria entonces la renta mensual es grande”, dijo Rubén. El joven a su vez necesita una alimentación especial que no le haga daño por que ha tenido que consumir medicamentos toda la vida. “Hay que disminuir el dulce, así como también la sal, debemos darle puras cosas naturales, a veces la carne de res le cae bien pero las otras le generan convulsiones y algo que si nos ayuda mucho porque además es un poquito más económica es la salchicha manguera”, afianzó  el tío.

Buscan ayuda
Como esta familia es de escasos recursos ustedes los pueden ayudar con el tratamiento de este joven, pues su familia siempre ha querido sacarlo adelante. “Nosotros necesitamos pañales, medicamentos, silla de ruedas, colchoneta porque ya la tiene dañada, almohadas, sabanas, ropa, comida y muchas cosas más porque él es como un bebe, se hace popo y no dice, solo dice “teta” cuando tiene hambre”, dijo su hermano.

PARA DESTACAR: Si desean ayudar a esta familia pueden comunicarse a los teléfonos 3108246110 – 3147324308.


EXPLICACIÓN MÉDICA

Según un informe médico, el Joven José Toribio presenta un cuadro clínico denominado Síndrome Convulsivo, parálisis infantil, epilepsia y retardo mental con trastorno de personalidad.     

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