Natalia y Leidy Jhoana Castaño, dos hermanas que se
debaten entre las ruedas y los triunfos.
Por: Juan Carlos
Rivera
Natalia
Natalia Castaño a con tan sólo 12 años ya se proyecta como toda una
campeona mundial. Desde hace 7 años, cuando apenas cumplía 5 años de vida, sus
padres la ingresaron a la escuela de patinaje Orgullo Jamundeño y desde hace ya
dos años la escuela de patinaje de Arroz Blanquita la está patrocinando.
Actualmente Natalia cursa el grado séptimo en la institución educativa
España; a pesar de su corta edad ya muestra con orgullo más de 38 medallas
entre oro, plata y bronce, y expresa que una de sus metas llegar a ser campeona
mundial de patinaje y dejar en alto el nombre de su municipio: “Le doy gracias
a Dios y al señor José Manuel Suzo por apoyarnos en el deporte, al igual que a
mis padres y mi hermana quien a diario me da las fuerzas para continuar en esta
disciplina”.
Leidy
Por otra parte, Leidy Jhoana Castaño desde los 13 años empezó en el
patinaje pero una lesión en su rodilla le impidió seguir como patinadora, pero
también cosechó varios triunfos que logró durante ocho años de carrera. Ahora
se desempeña como monitora en la escuela donde su hermana es toda una campeona,
con tan sólo 20 años tiene muy claro lo que quiere: “El destino me jugó una
mala pasada pero Dios me puso como monitora para enseñarles lo mejor de mí y
poder formar a los niños como los futuros campeones del mundo”, aseveró Leidy.
Por lo anterior, Jamundí no dejará de cosechar triunfos gracias a todo
el talento que tienen los descendientes del ‘cacique’.
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